Páginas

domingo, 8 de enero de 2017

EL PODER DE LA INTENCIÓN CAPITULO 9


CAPÍTULO 9. 

ES MI INTENCIÓN SER AUTÉNTICO Y PACÍFICO CON TODOS MIS FAMILIARES:

Ser pacífico y auténtico puede definir la relación con tu familia, pero en primer lugar, quizá tendrías que evaluar la relación con tu pariente más cercano: tú. Descubrirás que como te tratan los demás tiene mucho que ver con cómo te tratas a ti mismo y enseñar así a los demás a tratarte.



TE TRATAN COMO ENSEÑAS A LOS DEMÁS A TRATARTE.

Asumir la responsabilidad de cómo te tratan los miembros de tu familia te ayudará a crear con todos ellos la clase de relación que concuerda con la mente universal de la intención.



Tus relaciones familiares están en tu mente. Si tus familiares han adquirido poder es porque tú se lo has concedido. Si piensas que algo anda mal o que algo falta en esas relaciones, eso indica que te pasa algo, ya que, por lo general, cualquier cosa que veas en cualquiera es un reflejo de algún aspecto tuyo, porque, si no, no te importaría y ni siquiera te darías cuenta. Para cambiar el carácter de las relaciones familiares tendrás que cambiar tu forma de pensar sobre ellas y llegar hasta lo inconcebible con un salto mortal. Todo puede cambiar milagrosamente cuando decides estar en paz con todas las personas que hay en tu vida, y sobre todo con tu familia.

Si el diálogo interior con los miembros de tu familia se centra en lo que hacen mal, así será precisamente como experimentes tu relación con ellos, si se centra en lo que te molesta de ellos, eso es lo que notarás. Por mucho que les culpes a ellos de tu irritación, esa irritación es asunto tuyo, y surge de tus pensamientos. Si tomas la decisión de dirigir tu atención interior, tu energía vital, hacia algo distinto, cambiará tu relación. En tus pensamientos, donde existen tus relaciones familiares, no te sentirás molesto, enfadado, herido ni deprimido. Si piensas: “Mi intención es ser auténtico y pacífico con este familiar”, eso es lo que experimentarás, incluso si ese familiar sigue actuando como siempre.



Cambiar de forma de pensar significa cambiar tus relaciones. Recuerda que es la alta energía del amor lo que puede disolver las bajas energías. Si tienes la intención de llevar paz a una situación y estás viviendo en el nivel de la intención, dejarás esa situación con una sensación de paz. Poco a poco, a medida que vas comprendiendo la fuerza de la intención y dejando a un lado el ego, empezarás a sustituir el enfado y el fastidio por la bondad, la receptividad, el amor e incluso la belleza.



HACER DE TU INTENCIÓN TU REALIDAD:

Diez pasos para poner en práctica la intención de este capítulo:

1. Reconoce tu intención verbalmente y por escrito. Al final tu pensamiento se hará sublime, y tu mundo interior y exterior se harán uno.

2. Desea para tus familiares lo que deseas para ti. Simplemente tienes que imaginarte a las personas de tu familia con las que no te sientes en paz y sentir la paz que deseas para ellas.

3. Sé tú la paz que buscas en los demás. Si lo que falta en la relación con tu familia es la paz, eso significa que en tu interior hay un lugar que ocupa la ausencia de paz.


4. Corresponde con las siete caras de la intención. La mente universal es creativa, bondadosa, amante, bella, en continua expansión, infinitamente abundante y receptiva a toda la vida. Esta clase de energía espiritual te transformará, pero no solo a ti, también a tu familia. Tu intención de mantener relaciones pacíficas esta adquiriendo forma, primero en tu mente, después en tu corazón y finalmente se materializará.

5. Examina todos los obstáculos que se te han interpuesto en tu camino para conseguir la paz familiar. Recuerda a tu ego que ya no vas a optar por sentirte ofendido ni a necesitar llevar siempre la razón en esas relaciones.

6. Actúa como sí. Inicia el proceso de actuar como si lo que tienes intención de manifestar ya fuera una realidad. Ve a todos los de tu familia a la luz y con el amor que son su verdadera identidad. Debes ver la luz en los demás y tratarlos como si eso fuera lo único que vieras.

7. Deslígate de los resultados. No es cosa tuya que todos los miembros de tu familia piensen, sientan o crean lo mismo que tú. Lo más probable es que observes cambios drásticos en tu familiares cuando les enseñes con tu ejemplo cómo quieres que traten, pero si no cambian, y si continúan con actitudes no pacíficas, olvídate de la necesidad de verlos transformados. “Déjalo en manos de Dios”.

8. Afirma: solo atraigo paz a mi vida. Dilo para tus adentros como una verdad absoluta con firme determinación, y siempre te funcionará. La gente responderá con una sonrisa, con agradecimiento, con gestos amistosos y saludos.

9. No le guardes rencor a nadie y practica el perdón. La clave para que reine la paz en todas tus relaciones familiares consiste en el perdón. Tu familia se limita a hacer lo que les han enseñado a hacer toda la vida, y lo que les enseñaron a hacer a sus antepasados. Que tu corazón los colme de comprensión y perdón.

10.Mantente en un estado de gratitud. En lugar de mantenerte en un estado de ausencia de paz con los miembros de tu familia, reza una oración de gratitud por su presencia en tu vida y por todo lo que pueden enseñarte.

Mientras intentas alcanzar el conocimiento absoluto de que esta intención se manifestará, recuerda también a diario que no se puede solucionar una mala relación condenándola.


Wayne Dyer

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por tu comentario.