Hace cinco años tuvimos el primer contacto claro sobre la apertura de los portales 11-11. Fue un evento energético que en diferentes formatos, creencias y simbologías llegó a todos los rincones del mundo haciendo sentir su fuerza inspiracional de manera increible. El electrizante empuje de los campos electromagnéticos de la tierra nos demostró (a través del fuerte despertar que produjo en millones de conciencias receptivas) el principio de unidad en el que el ser divino se manifiesta, abriéndonos las puertas perceptivas a una inmensa red de fuerzas con las que hemos estado resonando en una perfecta simbiosis energética.
Todas las experiencias que tuvimos durante ese primer contacto y los reflejos del camino que recorríamos y que el cielo ha estado interpretando bajo el principio “como es arriba es abajo”, nos han conducido durante estos cinco años a una infinidad de experiencias y revelaciones personales y grupales, que nos sitúan nuevamente, esta vez altamente capacitados y vinculados, ante un nuevo encuentro de dimensiones similares.
El camino recorrido hasta aquí, nos muestra el camino que nuestro ser ha emprendido para hiper-comunicar a niveles superiores. Todos los vehículos del hombre han estado sujetos durante estos años a diferentes reajustes, a brutales empujes, a sagrados rituales de sacralización y re-conexión con la propia fuente interna, mientras a su vez, era suavemente mecido, o bruscamente empujado a diferentes experiencias físicas, emocionales y mentales que nos relevaban más y más la “unidad” multidimensional en la que hemos empezado a manejarnos.
Tras el tiempo de apertura del portal 11-11 llegó el tiempo de la oscuridad. De la transferencia de información de la luz a la sombra, del mundo solar al mundo lunar, de la “probación” de la práctica, de la puesta en marcha de todos los protocolos y actuaciones de una nueva era.
Muchos comentarios fueron del tipo “es como si nos hubieran soltado la mano”, después de un estado superior, volátil, hipersensible regresamos aparentemente desnudos y solos para recorrer las profundidades de la materia, de la memoria, del karma y el Ánima Mundi.
El portal, el potente agujero de gusano cósmico (que en realidad no fue cerrado en ningún momento) que permitió el encuentro y el traspaso de frecuencias entre el quinto reino o ángeles solares y la humanidad, ha conseguido que durante este tiempo, nuestro ADN, nuestras células y átomos reorienten y reactiven sus principios solares, volviendo nuestro cuerpo, nuestras emociones, y nuestra mente un “espacio” receptivo y sensible a corrientes y vibraciones superiores fuera del espacio-tiempo de la tierra.
Así la potente reunión de la humanidad con los Ángeles Solares en 2008 donde a través del portal pudo generarse una frecuencia similar entre ambos reinos que permitió el intercambio brutal de información y empuje, vuelve a repetirse ahora, cinco años después, ofreciéndonos una nueva oportunidad para ahondar en los misterios universales.
Los Ángeles Solares, el grupo de mentes avanzadas que sostiene la ciencia concreta para la transformación de la humanidad y la ascensión de las Almas, nos convocan nuevamente a un encuentro de intercambio, que como la vez anterior supondrá una nueva activación de la inspiración, de la creatividad, de la “emoción” y las fuerzas que nos empujaron a comenzar a movernos en niveles de unidad y conciencia muy superiores.
Venus, nuestro alter ego, aquellos Ángeles Solares que liberaron a Prometo con el fuego de la mente en un sacrificio símbolo exponencial del Amor Universal, vuelven a reencontrarse con nosotros, a tomar de nuevo su rol de ángeles caídos, descendiendo a niveles vibracionales más densos que van a permitirnos nuevamente el intercambio, un salto cuántico, una transformación profunda de la mente (el sistema de Venus en una vuelta de espiral superior, y sus ángeles solares, avatares de la fusión mente-amor, Buddha-Cristo).
La potente influencia que
Venus va a tener durante este ciclo va a sumergirnos de nuevo en una crisálida energética. Igual que anteriormente tras el poderoso encuentro del portal, el intercambio de información dimensional entre Ángeles Solares y hombres despiertos, se disipará para conducirnos a la propia experimentación. La nueva información, la materialización que ha de surgir de este poderoso encuentro creativo, nos devolverá nuevamente a la sombra, a la materia, a la tierra donde todo proceso puede ser llevado adelante, a los misterios divinos de la madre, que ha de cobijar toda revelación solar en su vientre para que los reinos lunares o elohims de la forma, lleven a cabo la “realidad” de una nueva tierra y una nueva raza raíz.
La hiper-actividad de la mente y la emoción durante este periodo va a ser intensa y transformadora. Una corriente de nuevo aire divino va a sumergirse en nuestra crisálida personal embelleciendo y potenciando la mariposa que tras recorrer y reconocer las múltiples expresiones de vida en la que se mece, se dirige al encuentro de su fuerza, del águila que ha de sobrevolar la vida por encima de cualquier tormenta de la maya o de la falsa percepción del mundo que se desmorona.
El astro se reúne durante cuatro meses sobre la cumbre de Capricornio. El monte de Tabor de la transmutación, cuyo recorrido nos conducirá a una plenitud inconmensurable en el equinoccio de primavera.
Parravicini transcribió una psicografía que se nos muestra reveladoramente mágica en estos momentos en que nos encaminamos nuevamente a un reencuentro interdimensional único.
Los movimientos energéticos de este nuevo tiempo de re-conexión serán delineados en el siguiente post.
Saben ya que energía son y en esos términos nos movemos ya.
Aprovechen el reencuentro, conéctense a las frecuencias sutiles que el esforzado trabajo previo y todas las vicisitudes que han pasado en el camino les regalan esta mágica crisálida, consciente, firme y transformadora.
Que su Ángel Solar se fortalezca. Que su Alma crezca a la gran realidad de la que forma parte. Que la comunicación revele la verdad de sus siguientes pasos. Que el Amor les cubra permitiendo que la genialidad de esa mente que acrecientan, siembre un radiante mañana, de fraternidad y luz.
Namasté
Anabel.C.Huertas
fuente:http://angelesdebarro.com/2013/11/08/portal-11-11la-nueva-crisalida-parte-i/