Kim Eng - "Durante mis viajes, una de las preguntas
más frecuentes que me hacen es "¿Qué se siente al tener
una relación con un ser iluminado?" ¿Por qué esta pregunta?
Tal vez ellos tienen la idea o la imagen de una relación ideal,
y quieren saber más sobre ello. Tal vez sus mentes quieren
proyectarse a un futuro en el que ellos también estarán en una
relación ideal y se encontrarán a sí mimos a través de ella"
Conversación entre Kim Eng y Eckhart Tolle - ¿Qué se siente al tener una relación con un ser iluminado? Siempre que tengo la idea en mi cabeza "Tengo una relación" o "estoy en una relación", no importa con quién,
sufro. Esto lo he aprendido.
Con el concepto de "relación" vienen expectativas, recuerdos de relaciones pasadas, y además conceptos mentales condicionados personales y culturales de lo que una "relación" debería ser. Después trataría de hacer que la realidad se ajustase a estos conceptos. Y nunca lo hace. Y vuelvo a sufrir. La cuestión del asunto es:
no hay relaciones. Sólo existe el momento presente, y en el momento sólo hay un relacionarse.
Cómo nos relacionamos, o mejor dicho cómo de bien amamos,
depende de lo vacíos que estamos de ideas, conceptos, expectativas. Recientemente, le pedí a Eckhart que dijera unas pocas palabras sobre la búsqueda de "relaciones amorosas" del ego. Nuestra conversación fue profundizando rápidamente para referirse a algunos de los aspectos más profundos de la existencia humana. Esto es lo que dijo:
Eckhart Tolle: Lo que convencionalmente llamamos "amor" es
una estrategia del ego para evitar rendirse. Estás buscando a alguien para que te dé eso que sólo puede venirte en el estado de rendición. El ego
utiliza a esa persona como un sustituto para no tener que rendirse. El idioma español es el más honesto a este respecto. Utiliza el mismo verbo 'querer', para decir "te amo" y "te quiero". Para el ego,
amar y querer (desear) son lo mismo, mientras que el amor verdadero no tiene ningún deseo, ningún deseo de poseer o que tu pareja cambie. El ego escoge a alguien y lo hace especial. Utiliza a esa persona para tapar el constante sentimiento subyacente de descontento, de "no suficiente", de ira y odio, que están estrechamente relacionados entre sí. Estas son facetas de un sentimiento profundamente arraigado subyacente en los seres humanos, que es inseparable del estado egoico.
Cuando el ego escoge algo y dice "yo amo" esto o aquello, es un intento inconsciente de
ocultar o eliminar los sentimientos profundos que siempre acompañan al ego: el descontento, la infelicidad, la sensación de insuficiencia que es tan familiar . Por un tiempo, la ilusión realmente funciona. Pero entonces, inevitablemente, en algún momento, la persona que has elegido, o has hecho especial a tus ojos, deja de funcionar como una tapadera para tu dolor, el odio, el descontento o la insatisfacción que tienen su origen en la sensación de insuficiencia y de sentirse incompleto. Entonces, surge la sensación que estaba oculta,
y se proyecta sobre la persona que había sido elegida y hecha especial – quien pensabas que en última instancia iba a "salvarte". De repente, el amor se convierte en odio. El ego no se da cuenta de que el odio es una proyección del dolor universal que sientes dentro. El ego cree que esta persona
es la causa del dolor. No se da cuenta de que el dolor es el sentimiento universal de no estar conectado con el nivel más profundo de tu ser – no ser uno con uno mismo.