jueves, 10 de diciembre de 2015

“El Bien y el Mal” Emilio Carrillo


1. Acercamiento desde la objetividad.
2. Ahora sí, el Bien y el Mal.
3. El pecado no existe.
4. La “interacción consciencial”: el “Juicio Final”.
5. La Clave es el Amor.
  1. Acercamiento desde la objetividad
Las ideas y percepciones en torno al Bien y al Mal se mueven casi siempre en el ámbito del más absoluto subjetivismo. Con intensidad e inconsciencia, volcamos en los dos tanto los clichés y convencionalismos de la tradición cultural y religiosa en la que hayamos sido educados como los prejuicios generados por la mente de cada cual, en función de sus propias vivencias y respectivos deseos, apegos, fobias y frustraciones.
Sin embargo, resulta crucial que la objetividad presida la actitud y la aptitud para discernir sobre el Bien y el Mal. Objetividad que ha de estar fundamentada en el distanciamiento personal del asunto y el acercamiento a él por medio de la meditación serena y profunda, el conocimiento revelador que de ésta dimana y la experiencia cotidiana que la puesta en práctica de ese conocimiento aporta.
En este orden, es oportuno subrayar que, en el Omniverso multidimensional surgido de la Creación, los “hechos” (por ejemplo, si suelto un vaso que mantenía sujeto con la mano, el vaso caerá al suelo) están regidos por una serie de “leyes físicas” (en el caso expuesto, la llamada ley de la gravedad) y éstas, a su vez, por una serie de “principios”, conocidos desde la antigüedad como “principios herméticos”. Dos de ellos, el de polaridad y el de vibración, son muy útiles para acercarnos con objetividad al Bien y al Mal.
El principio de polaridad afirma que todo tiene dos polos que son idénticos en naturaleza y diferentes en grado vibratorio. Esto es, que tanto los fenómenos físicos como los mentales tienen dos lados o aspectos extremos que, sin embargo, comparten la misma naturaleza, aunque se diferencien en el nivel de vibración, existiendo innumerables grados vibratorios entre ambos polos.
Para entender mejor lo anterior, hay que acudir a otro eje del saber hermético: el principio de vibración. Como se ha repetido en capítulos previos, la ciencia contemporánea se está acercando a él con celeridad tras reconocer que la materia y la energía son expresiones de ondas y movimientos vibratorios. Concretamente, el principio de vibración indica que todo vibra, que el Omniverso en su globalidad y en todas sus dimensiones es una plasmación de la vibración y que las diferencias entre las diversas manifestaciones -desde las intangibles a las tangibles, desde el espíritu más sutil a la materia más espesa- obedecen al distinto modo e intensidad vibratorios. Así, la frecuencia más elevada radica en la vibración pura del Espíritu divinal, la Esencia de Dios; y su opuesto en la materia más extremadamente densa que podamos imaginar. El grado vibracional es lo que distingue a ambos polos, entre los que hay un sin fin de diferentes potencias y modalidades vibratorias.
Sobre estas bases, hay que resaltar que la indagación que sustenta el principio de polaridad arranca de la formulación de interrogantes tan paradójicos y radicales como estos: ¿dónde termina la oscuridad y comienza la luz?; ¿dónde el frío y dónde el calor, o lo duro y lo blando?; y ¿lo pequeño y lo grande, o lo alto y lo bajo?. Sopesemos el hecho de que se trata de nociones -oscuridad, luz, frío, calor,…- que utilizamos asiduamente y con completa seguridad acerca de lo que son y significan. Pero, por centrarnos sólo en un botón de muestra entre los ejemplos expuestos, ¿dónde empieza el frío y dónde el calor?. Porque la temperatura es un concepto primario y sin ambivalencias; y el termómetro es un instrumento válido, neutral y sencillo para su medición. Hasta aquí todo perfecto, pero ¿dónde comienza el frío y dónde el calor?. Por vueltas que demos a la posible respuesta, siempre llegaremos a la conclusión de que frío y calor, por más que parezcan realidades del todo distintas, son, en verdad, de idéntica naturaleza (la podemos denominar temperatura), siendo la diferencia entre ambos mera cuestión de vibraciones calóricas, grados vibratorios.
La frecuencia vibratoria es, igualmente, la que marca la diferencia en la escala musical entre los sonidos graves y los agudos; o la que en la gama de colores genera la variedad de los mismos; etcétera. Y esto no ocurre no sólo en los planos físicos y materiales, sino igualmente en los de carácter mental. Así, el amor y el odio, estimados por lo general como inapelablemente diferentes, son realmente denominaciones que otorgamos a los polos de una misma cosa, con muchos grados, eso sí, entre ambos. Empezando en cualquier punto de la escala, hallaremos más amor o menos odio, si ascendemos por ella; o menos amor o más odio si descendemos por la misma. Y esto es cierto sin importar nada el punto alto, medio o bajo que tomemos como partida. Hay muchos grados de amor y odio y un punto intermedio en donde el agrado y el desagrado se mezclan de tal forma que es imposible distinguirlos. El valor y el miedo quedan, igualmente, bajo la misma regla.
  1. Ahora sí, el Bien y el Mal

El Amor no es una relación – Osho


El amor no es una relación. El amor es un estado; no tiene nada que ver con nadie más. Uno no se enamora, uno es amor. Por supuesto, si eres amor estás enamorado ése es el resultado, la consecuencia, pero no el origen. El origen es que eres amor.

¿Quién puede ser amor? Evidentemente, si no eres consciente de quién eres, no podrás ser amor. Serás miedo. El miedo es exactamente lo contrario del amor. Recuerda que el odio no es lo contrario del amor, como la gente piensa. El odio es amor al revés, no es lo contrario del amor. Lo contrario del amor realmente es el miedo.

Con el amor te expandes, con el miedo te encoges. Con el miedo te cierras, con el amor te abres. Con el miedo dudas, con el amor confías. Con el miedo te quedas en soledad. Con el amor desapareces; se desvanece la cuestión de la soledad. Si no existes, ¿cómo te puedes sentir solo? Entonces, estos árboles, los pájaros, las nubes, el sol y las estrellas están dentro de ti. El amor es cuando conoces tu cielo interno.

Los niños no tienen miedo; los niños nacen sin miedo. Si la sociedad puede ayudarles y apoyarles para que permanezcan sin miedo, si les ayuda a subirse a los árboles y a las montañas, y a nadar en el mar y los ríos —si la sociedad puede ayudarles con todos sus medios a ser aventureros, aventureros de lo desconocido, y si la sociedad puede provocar una búsqueda en vez de darles creencias muertas entonces, los niños se volverán grandes amantes, amantes de la vida. Ésta es la verdadera religión. No hay mayor religión que el amor.

Medita, baila, canta y profundiza más en ti mismo. Escucha a los pájaros más atentamente. Mira las flores con asombro, con admiración. No te vuelvas erudito, no etiquetes las cosas. Eso es la erudición, el maravilloso arte de etiquetarlo todo, catalogarlo todo. Conoce gente, mézclate con la gente, con toda la gente que puedas, porque cada persona expresa una faceta de Dios distinta. Aprende de las personas.

miércoles, 9 de diciembre de 2015

CONVIÉRTETE EN LA PRESENCIA DE LA COMPASIÓN Y LA PAZ‏

Dr. Deepak Chopra
A nivel espiritual o de la conciencia, todos estamos indisolublemente conectados con todas las demás personas y las cosas. Aunque parezca que nuestro cuerpo es una estructura física sólida, en realidad es un río en el que siempre fluyen la energía y la información, en intercambio constante y dinámico con nuestro entorno.

Las expresiones que utilizamos reflejan nuestro entendimiento innato de nuestra naturaleza, que es energía en esencia. Cuando decimos cosas como: “Sus palabras en verdad hicieron eco en mí”, “Tal persona me da mala vibra” o “Mi amiga tiene un gran corazón”, no se trata sólo de metáforas: realmente sentimos la energía de los otros y ésta nos afecta a un nivel muy profundo. 

Piensa en todas las cualidades de otra persona que captas intuitivamente a nivel energético. Además de poder decir si alguien está contento o triste, también puedes sentir si está en paz o alterado. Su mirada revela interés o tedio, ternura o indiferencia. Es difícil pensar en una cualidad humana que no tenga algún tipo de “signo” energético.

Como seres de energía, nuestro potencial de afectar a otros con ella o con el estado de nuestro ser es un gran don pero también una gran responsabilidad. Cuando entramos en una habitación, nuestra energía emana de nosotros. Sin decir una sola palabra, nos comunicamos mediante nuestro signo energético, creando ondas que pueden afectar a quienquiera que encontremos. 

Si el estado de nuestro ser está enfocado en el amor y la compasión, ésa es la energía que comunicamos a los demás. De igual manera, si nos concentramos en los juicios, la hostilidad o el resentimiento, eso es lo que comunicamos.

A través de nuestra energía o conciencia, tenemos la capacidad ilimitada para enviar ondas que ayudarán al planeta y sus habitantes a ir en la dirección de la más alta evolución: del miedo, la hostilidad y el malestar al amor, la compasión, la paz y la dicha.

Convertirse en una fuerza de armonía
Un amigo me compartió una anécdota personal que ilustra el poder que tiene el mantenerse centrado en la paz. Caminaba por la calle en una gran ciudad cuando sintió el impulso de entrar a una panadería, con antojo por las delicias mostradas en la vitrina. Pero en cuanto puso un pie en el interior, vio que había problemas. 

Los beneficios de la relajación



A nivel psicológico, las técnicas de relajación son una herramienta muy importante para conseguir tranquilidad y quietud, dotándonos de estrategias para enfrentarnos a diversas situaciones de la vida cotidiana.

La práctica de las técnicas de relajación va a ayudarnos a disminuir los pensamientos que nos producen ansiedad y nos llevarán a un estado de calma y paz. Nos permiten dejar de lado las preocupaciones cotidianas, y la mente puede explorar y liberar los pensamientos. Es un tiempo que podemos dedicar a nosotros mismos y a nuestros sentimientos.

La relajación favorece un funcionamiento cerebral (ondas alfa y theta) similar al sueño y aumenta la capacidad de concentración y creatividad. También se favorece la visualización e imaginación.

Otros beneficios psíquicos de la relajación son la reducción de la agresividad, una mayor seguridad en uno mismo y mejor control emocional. También es útil para el desarrollo mental de adolescentes estudiantes y nos ayuda a prepararnos para enfrentarnos a situaciones conflictivas.

A nivel físico la relajación y la respiración afectan beneficiosamente a todos los aparatos del organismo. Libera las tensiones y contracturas musculares que pueden producir fatiga, dolores o calambres, evitando también el consumo excesivo de energía.

En cuanto al aparato circulatorio, la relajación de la musculatura que rodea los vasos sanguíneos, permiten mayor dilatación y un mejor aflujo de sangre a todo el cuerpo. El corazón puede bombear a menor presión y se reducirán el número de pulsaciones y la tensión arterial.

En el aparato respiratorio mejorará la ventilación general al aumentar la capacidad pulmonar por la relajación de la musculatura que rodea los pulmones. También podrá entrar más aire a los alvéolos al relajarse la musculatura del árbol bronquial.

En el aparato digestivo, la relajación de la musculatura digestiva proporciona una sedación natural opuesta a las disfunciones y espasmos, al tiempo que mejora la digestión.

El aparato urológico, al igual que el digestivo, se verá beneficiado al mejorar los espasmos generadores de cólicos y disurias.



¿Para qué sirven las técnicas de relajación?

El objetivo de las técnicas de relajación es prepararnos para que seamos capaces de controlar nuestra activación fisiológica. El control de la activación nos facilitará el enfrentamiento a situaciones que nos provocan estrés o ansiedad.

A continuación puedes encontrar una descripción de las principales aplicaciones de estas técnicas.

Población general:

• Estados de tensión o preocupación cotidiana relativamente frecuentes.

• Estados de ligero abatimiento o fatiga.


Trastornos de ansiedad:

La extraña sensación de no pertenecer a este planeta


¿Tienes la sensación de que no formas parte de la Tierra? ¿No te sientes identificado con nada ni con nadie de este planeta? ¿Alguna vez has pensado que tus verdaderos orígenes podrían estar en algún lugar fuera de nuestro Sistema Solar? Entonces, si este es tu caso no te preocupes, no estás loco. Miles de personas en todo el mundo tiene la misma sensación, no tienen ninguna vinculación con este planeta.
Algunos investigadores sugieren que estas personas podrían ser espíritus que se manifiestan como seres humanos, que han venido de otros planetas o dimensiones superiores. Esta enigmática sensación incluye confusión sobre las normas de comportamiento en este planeta, sentirse “diferente” a los demás, o encontrarse atrapado dentro de una ilusión. Estas personas o espíritus pueden tener la necesidad de escapar de esta realidad, pero “algo” les mantiene en la Tierra. Aunque lo peor de todo es que ya desde que nacen tienen estas misteriosas sensaciones, lo que les hacer estar discriminado por una sociedad políticamente correcta.
Procedentes de otros mundos
Expertos en el tema aseguran que los espíritus que encarnan en la Tierra procedente deotras civilizaciones planetarias avanzadas son más desarrollados espiritualmente. Siendo almas más viejas, más equilibradas y en sintonía, encuentran la locura de esta ilusión terrenal un tanto estresante y desconcertante. Se sienten como si la Tierra no fuera su verdadero hogar. La realidad es que su mundo natal podría ser altamente civilizado, con una población que opera en unidad y armonía, con conductas sociales y un equilibrio socioeconómico.
Espiritualmente, estas personas inconscientemente conocen la importancia de altas energías de vibración como el amor y la luz, y que son parte de una sola creación infinita, pero por desgracia también están sujetos al olvido cuando nacen. Por otra parte, este olvido “voluntario”es necesario de lo contrario no podrían vivir en esta realidad. Aquellos que sienten como la Tierra no es su verdadero hogar puede tener un gran interés en la tecnología y en el tema paranormal, son amables y con ganas de ayudar a los demás, y sin olvidarnos de que son muy despiertos espiritualmente, unos rasgos procedentes de suraza extraterrestre.
¿Cómo se sienten?
Como hemos comentado anteriormente, desde su infancia, estas personas son incomprendidas y les resulta difícil localizar a otros como ellos. Una vez que consiguen encontrar personas afines a sus ideas y sentimientos pueden progresar espiritualmente juntos y conseguir avanzar en la vida. Sin embargo, incluso así hay un trasfondo de insatisfacción, ya que esta ilusión terrenal continúa alterando sus sentimientos. La confusión puede surgir debido a que su subconsciente o espíritu recuerda “su vida anterior”, sin embargo, tiene que convivir con la desigualdad, las crisis financieras, los problemas sociales, las guerras, y una comunidad mundial que carece de unidad.
Sensación no pertenecer a este planeta
Esto no evita que sientan la necesidad de ayudar a los demás, ya que vinieron a nuestro planeta con este objetivo. A veces, el aislamiento puede evitar que sus objetivos se cumplan, necesitando amor, guía y apoyo de otras personas para que vuelvan a la vía positiva.
¿Cómo es posible?
En la comunidad espiritual se cree que la Tierra está cambiando la vibración planetariade la tercera a la cuarta dimensión. Muchas almas están encarnando aquí de otras esferas planetarias y de dimensiones superiores, que son mucho más avanzadas que la nuestra. Estas personas están aquí para la transición y es una gran oportunidad para el aprendizaje y la experiencia. El objetivo general es completar otra vida de descubrimientos en beneficio de la conciencia universal y la creación. A su vez, estas almas avanzadas elevan la vibración del planeta para que se pueda realizar con éxito la transición de la tercera a la cuarta dimensión.
Aunque la frecuencia de la energía de la Tierra está aumentando, la mayoría de espíritus que encarnan aquí tienen una vibración más baja, representada por la codicia, el hambre de poder y la manipulación. Algunos espíritus están encarnando aquí desde otros planetas como el nuestro. Estos espíritus se han desarrollado lo suficiente como para hacer la transición.
No pertenecer este planeta
¿Qué hacer si tienes esta sensación?

martes, 8 de diciembre de 2015

Prepárense para el espéctaculo: un cometa de dos colas se encamina a la Tierra y "no decepcionará"


El cometa de dos colas C/2013 US10 ha completado su viaje alrededor del Sol y empieza su acercamiento a la Tierra, ofreciendo un espectáculo impresionante a los habitantes del hemisferio norte, informa la NASA.

Según la agencia espacial, el cometa Catalina, oficialmente conocido como C/2013 US10 (Catalina), "se encamina hacia su máxima aproximación a la Tierra", hecho que tendrá lugar en enero.
"Con el resplandor de la Luna ahora fuera del camino, los observadores de la mañana en el hemisferio norte de la Tierra están consiguiendo su mejor vista del nuevo cometa. Y el cometa Catalina no decepcionará", promete laNASA.
Aunque no es tan brillante como indicaban las primeras predicciones, el cometa está luciendo dos colas: una de polvo y otra de ion, por lo que es un objeto impresionante para binoculares y cámaras de larga exposición, agrega la agencia estadounidense.
El cometa, procedente de la nube de Oors C/2013 US10, fue descubierto en octubre de 2013 por los astrónomos del Catalina Sky Survey.
Según había informado el portal Earthsky.org, Catalina, con una magnitud actual de entre 6,1 y 6,5, será completamente visible el próximo 17 de diciembre pudiendo alcanzar una brillantez suficiente para ser observable a simple vista, siempre y cuando el avistamiento se haga desde lugares oscuros y alejados de la contaminación lumínica. 
El 31 de diciembre, Catalina se encontrará a solo un grado de la estrella Arturo, la más brillante del cielo para quienes viven en el hemisferio norte, y el 12 de enero de 2016 el cometa se situará en su distancia más cercana a la Tierra (107.700.000 kilómetros).
fuente:https://actualidad.rt.com/ciencias/193561-preparense-espectaculo-cometa-cola

La Inteligencia Pura es Silencio


Robert: Me alegro de estar de nuevo con ustedes. ¿Y si les dijera que ustedes son la realidad absoluta, me creerían?

Estudiante: Sí.

R: ¿Tú lo harías? ¿Por qué? (S: Porque es la verdad.) ¿La verdad de quién? (S: La verdad.)

Robert continúa: Es una palabra. La realidad absoluta. ¿Pero puedes identificarte con eso? ¿Puede ser tu verdad? Desafortunadamente la mayoría de nosotros creemos que tenemos que pasar por experiencias. Tenemos que realizar sadhana. Tenemos que practicar disciplinas espirituales. Tenemos que hacer todo tipo de cosas extrañas. Y luego, si Dios nos quiere, nos convertiremos en auto-realizados. Es todo una mentira. Has sido hipnotizado para creer en todo lo que crees, todo. Por ejemplo, si piensas que aceptas la verdad y eso te ayuda, estás equivocado.

A modo de ejemplo, si les pregunto si el mundo es real, entonces la mayoría de ustedes diría que no. Pero eso es ridículo, porque la inteligencia relativa que dijo esas palabras es la misma inteligencia relativa que mantiene al mundo unido. Como veis, las dos vienen del mismo lugar. ¿Me siguen? El mundo es inteligencia relativa. Cuando dices que el mundo no es real estás hablando desde la inteligencia relativa. Si supieras la respuesta, te darías cuenta de que es el silencio. La respuesta es el silencio, la inteligencia pura.

La realidad es inteligencia pura. El mundo no tiene nada que ver con eso. Ni tampoco tu boca, o tu cuerpo o tu mente. ¡La inteligencia pura es el silencio, sat-chit-ananda, Para-brahman, la conciencia pura! Eso eres tú. Cuando lo expresas y piensas en ello, no eres eso. Pero cuando lo sueltas y te vuelves silencioso sin pensamientos, entonces te conviertes en puro ser, y no tienes absolutamente nada que ver con el mundo. Así que el mundo es real, en la medida en que crees que tu cuerpo es real. No puedes creer en tu cuerpo y tu mente, y creer que el mundo es falso. Sólo cuando trasciendes tu ego, entonces te conviertes en la inteligencia pura, que es lo que siempre has sido de todos modos. De lo contrario, es como si el sol viajara a través de todo el universo buscando la luz, y le preguntara a la luna, “¿Me puedes mostrar donde está la luz?” Porque le parece que la luna tiene luz. Así que la luna cree que tiene sabiduría. No se da cuenta que está reflejando la luz del sol. Se cree que tiene luz propia.


Lo mismo ocurre con nosotros. Creemos que somos seres mortales vivientes. Creemos que tenemos sustancia y nuestra mente nos dice que tenemos que pasar por todo tipo de experiencias para aprender, para llegar a ser un súper ser, convertirnos en un superhombre, romper el caparazón de los chakras, y todo lo demás. Así que trabajamos toda nuestra vida tratando de lograr esto. Al final caemos muertos. Y seguimos de nuevo. Pensando, juzgando, manipulando, buscando, pasamos por eso una y otra vez, hasta que llega el momento en que nos decepcionamos por todo este asunto. Y eso, amigos míos, es lo mejor que puedes hacer. Estar decepcionado por toda la enseñanza. Y luego la sueltas. Dejas de luchar. Dejas de tratar de lograr cualquier cosa. Dejas de intentar ser inteligente. Simplemente te relajas. Y tu divinidad brilla por sí misma. No hay nada que necesites. Cuando hago esta declaración y las siguientes declaraciones, tu mente empieza a pensar. Cuando dije que no hay nada que necesites algunos de ustedes empiezan a pensar en las cosas que necesitan. No hay nada que tengas que llegar a ser. No hay nadie que tengas que buscar fuera, para que te ayude.

¿Puedes aceptar que todo sucede por sí mismo?

Tienes saboteadores o mentores internos‏


Suena la alarma: 6.30 AM. Alguienes internos, como unas voces sugieren: «¡diez minutos más!». Otra voz replica: «si te quedas no tendrás tiempo para preparar la reunión». Resolutivamente emerge un «ok, me levanto».

El diálogo interno no cesará hasta que vuelvas a acostarte. Una o diversas voces irán comentando y calificando lo que va ocurriendo e irán generando un clima interno del que depende tu felicidad, salud y productividad. La anhelada paz se desarrolla, ante todo, dentro de uno mismo. Sólo cuando la paz germina en el diálogo interior uno es capaz de crear una atmósfera de armonía genuina a su alrededor.

Muchas personas pasan toda su vida sin prestar atención al contenido de ese diálogo que tanta influencia tiene en su felicidad. Otros muchos se sentirán esclavizados por un saboteador interno que repite machaconamente: No soy capaz, no me lo merezco, soy un desastre… Tal vez, la relación con nuestro diálogo interior sea la más importante que tengamos a lo largo de nuestra vida y, sin embargo, se la ignora en la educación formal.

¿Quién maneja el mando de tu tele interna? ¿Quién está en el centro de tu conciencia más tiempo a lo largo del día: las voces que patrocinan el control, el perfeccionismo y el temor o la voz de tu maestro interior conectada con tu esencia y la gran corriente de vida?

Las tradiciones milenarias han propuesto formas diversas de mermar el ruido interno, elevar la vibración de los pensamientos diarios y pasar de la estrecha mente cotidiana a la Gran Mente conectada con la expansión de la Conciencia, la Unidad y el Amor. En el budismo, el juego de la Conciencia parte de que en nosotros habitan un conjunto de «yoes» que van descubriendo la realidad y tienen distintas formas de concebirla y manifestarla. Estas conciencias han aprendido a sobrevivir detectando peligros mediante un gran esfuerzo de autoprotección, lo que ha hecho que se cierren en actitud defensiva. La percepción de la realidad a través de una lente defensiva nos aleja de lo trascendente: vemos el mundo aislado de nosotros y en esa disociación surgen diálogos internos y emociones que aunque tienen como intención protegernos generan ruido, separación y sufrimiento.

«Todo lo que somos surge con nuestros pensamientos.Con nuestros pensamientos hacemos el Mundo»
Buda-

La presencia plena del Mindfulness, el silencio, la meditación, los mantras, cultivar un observador imparcial para ser conscientes de la naturaleza de nuestros pensamientos, respirar conscientemente y transformar una mente dispersa en una mente centrada son prácticas que paulatinamente mejoran la calidad de nuestro diálogo. ¿Cuál es la parte más difícil? ¡Tan sólo hacer un hueco cada día para practicar!

Cuando a través de la práctica diaria y continuada se consigue detener este incontrolado diálogo mental la vida es… otra cosa. Te das cuenta de que, si pensar es un regalo de la evolución, la capacidad de hacer silencio interior lo es aún más. A partir de ahí comienza una bella aventura donde se hacen innumerables descubrimientos y se viven hermosas experiencias, tras las cuales, prefieres dedicar más tiempo a contemplar y menos a pensar, más tiempo a acariciar y menos a contar.

Castaneda afirma: «El silencio no es definible. Cuando lo practicas, lo percibes. Si lo tratas de entender lo bloqueas. No lo veas como algo difícil o complejo, no es nada del otro mundo, es algo natural, tan sólo es acallar las voces de la mente. No es solamente la ausencia de pensamientos, más bien se trata de suspender los juicios, contemplar sin interpretar. Entrar al silencio se puede definir, como «aprender a pensar sin tantas palabras». Quienes paran su diálogo interno ya no interpretan, son pura percepción presente, no se desilusionan o arrepienten, pues todo lo que hacen parte del Centro de lo que ES y viven en un estado más auténtico de libertad. Es nuestra condición natural, nacimos del silencio y allá volveremos. Lo que nos contamina son las ideas superficiales que se cuelgan en nosotros a partir de nuestra forma de vivir. Esas voces no tienen ninguna utilidad porque prácticamente están dirigidas al engrandecimiento del ego».

La idea de cultivar un observador externo inspiró la práctica de muchos budistas, yoguis, taoístas y chamanes a lo largo de los siglos. La PNL, el coaching, la psicología cognitiva, humanista y transpersonal rescataron sus enseñanzas para ponerlas al servicio de Occidente. La física cuántica ha hecho célebre el mensaje: «A escala cuántica, la observación no sólo afecta e influye al objeto que está siendo observado… lo crea» (P. Jordan).

Recientemente se han hecho investigaciones que ilustran el efecto de dejar el mando de tu vida a un saboteador interior. Friedman y Rosenman definieron en los años 60 el patrón del riesgo coronario, recomendando una reeducación mental a los individuos cuyo diálogo interno está volcado en mantener una hiperactividad y un esfuerzo crónico para conseguir un número ilimitado de metas diarias. Su diálogo tiende a un uso abusivo de mensajes activadores y juicios hostiles hacia uno mismo con la intención positiva de propiciar la pronta realización de una tarea y abordar inmediatamente la siguiente. Hay una clara y noble intención positiva para que el cerebro use este diálogo: estar activo, ser productivo,… Si el cerebro decidió automatizarlo fue porque en algún momento le resultó útil. No obstante, los efectos secundarios no buscados superan el beneficio de la intención positiva inicial. Este diálogo interno afecta la salud fisiológica y mental a largo plazo, pudiendo desembocar en trastornos de salud.

Todo diálogo interno es una estrategia de abordamiento que busca el bienestar y, aunque el empleo de mensajes hostiles pudo hacernos reaccionar eficazmente en el pasado, es preciso enseñar al cerebro que ahora tienes formas más nutritivas de motivarte.

Los efectos negativos de mantener un saboteador interior hostil y cargado de reproches son:
Descubrir qué te dices a ti mismo con esa voz en off que acompaña la película de tu día es un gran primer paso. Es preciso un mínimo de silencio interior y atención para llegar a escucharlo. Es preciso un mínimo de humildad para admitirlo.

Nuestro diálogo interno está compuesto por un sumatorio de juicios y creencias de quienes creemos ser que operan como algoritmos automáticos en una hoja de cálculo: configuran nuestra identidad y determinan resultados, estado y grado de satisfacción vital. Esas voces terminan convirtiéndose en saboteadores si no las aceptamos y reelaboramos. Rechazar o reprimir un saboteador dificulta su desaparición, pues termina convirtiéndose en un agente oculto de la resistencia.

Es posible cultivar un diálogo al servicio del ser y no al servicio de la supervivencia defensiva. Hay que iniciar un proceso de identificación, relación y transformación progresiva de cada una de esas voces para invitarlas a unirse cariñosamente a la fiesta de la vida.

Haz una lista de las voces habituales que más te influyen. Escuchas sus palabras exactas. Date unos días para escucharlos sin buscar ninguna conclusión adicional más allá de darte cuenta de lo que ocurre.

Establece una relación íntima, personal y cariñosa con cada uno de tus yoes y explóralos empezando por el más limitante. Fíjate en su voz (si es la tuya, de hombre o mujer, autoritaria…), si repite muchas veces o sólo una su mensaje… y qué parte del cuerpo se resiente tras escucharlo. ¿En qué situaciones concretas y con quién se activa? Hay voces que aparecen al sentir inquietud o culpa, en momentos de tomar decisiones, al probarnos ropa o cuando presentamos un proyecto laboral… Valora el protagonismo que tiene y de qué forma condiciona tu vida. Cuando el saboteador cobre vida podrás darle el nombre de un personaje. Ésa es una buena estrategia para independizarlo de tu ser y sentir que eres mucho más que el personaje. Hay arquetipos frecuentes: el tirano controlador, el resuelvetodo, el salvador de causas perdidas, la víctima herida, el miedoso que no se lanza, el juez que condena a todos, etc.

¿Qué creencia limitante refuerza el saboteador? ¿Es una creencia tuya o la compartes con tu sistema familiar, laboral, de amistades, etc.?