Para muchos de ustedes el dinero y los problemas financieros se han convertido en la piedra angular de su crecimiento espiritual debido a que los ha asistido en la comprensión de sus temores y dudas. El crecimiento espiritual y la iluminación han escogido hacerse presentes en esta encarnación. Muchos de sus sistemas de creencias se basan en y de hecho enseñan, que el dinero es la raíz de lo que se identifica como el mal por aquellos que se aferran a creencias que enseñan la dualidad y que las cosas son buenas o malas.
Así que muchos de ustedes que tratan de crear la tarea de su vida a partir de la práctica espiritual, están aparentemente en un equilibrio inestable en términos de su supervivencia con respecto al dinero, entrando en constante conflicto con los temas financieros. Como es conocido, ustedes crean su propia realidad con sus pensamientos y sentimientos y por tanto cada situación externa y evento es meramente una reflexión de su mundo interior de creencias y emociones. No se trata simplemente de decir que la falta de dinero en su vida es causada solamente por esto o aquello, es en general una combinación de factores que llevan a una ESCASEZ PERCIBIDA de abundancia Universal.
¡Yo puedo asegurarles que ni Dios ni el Universo están poniendo a prueba su valía en el servicio privándolos de dinero y riquezas! ¡Si hay alguien probándose son ustedes mismos!
Demos una ojeada a algunos de los sistemas de creencias prevalecientes. Entonces también podremos examinar algunas de las circunstancias emocionales y temores que bloquean el flujo de energía al que llamamos dinero.
Primeramente, existe una creencia subyacente que muchos comparten que establece que el dinero es la raíz del mal. Esto viene aparejado con algunas creencias que declaran que de alguna manera debemos rechazar la carne, vivir en la pobreza o luchar para probarnos merecedores de Dios. Les digo que no hay nada que ustedes tengan que hacer, decir o convertirse para recibir el amor de Dios. Todos son merecedores del amor de Dios y de la abundancia del Universo, simplemente porque usted es un hijo del Universo.
Lo único que deben hacer es SER esos hijos de Dios en total aceptación de ustedes mismos para recibir las grandes riquezas dentro de su realidad. Muchos de ustedes bloquean este flujo natural de abundancia porque de alguna manera sienten que hay honor y nobleza en el desarrollo y el aprendizaje a través de la lucha. Muchos de ustedes han ubicado al Divino en una posición paternal y tratan constantemente de resolver los temas pendientes de su niñez con sus parientes terrestres jugando con Dios al juego de “aprobación”. Ustedes se crean dificultades de manera que puedan a su vez decirle al Pariente Divino: “ves, era difícil, pero no perdí la fe ni me rendí. Me mantuve en mi sendero de cara a la pobreza, el tormento y la crítica”. En el intermedio, tratando de alcanzar la “aprobación”, también están tratando de obtener “permiso” para hacer lo que quieren. Es a lo que llamo “el péndulo permiso-aprobación”. Y ustedes nunca podrán ganar en esto hasta que se den cuenta de que son ustedes los que balancean el péndulo. Si usted reconoce algo de lo que estoy diciendo estará en camino a la solución de este asunto por sí mismo.
La creencia fundamental que necesitan cambiar es la creencia de que ustedes necesitan hacer o ser algo para poder recibir amor Universal y abundancia. Como niños, a muchos de ustedes se les dieron tareas y expectativas que constituyeron estándares con respecto a lo que tenían que hacer o en qué convertirse para ser un “buen niño o niña”. Tenían que hacer sus tareas, obtener buenas notas en la escuela, no llorar, etc. Estas condiciones que les fueron impuestas, se convirtieron en un círculo vicioso de fracasos y decepciones al tratar de lograr la aprobación familiar. Muchos de ustedes trataban de ganar un nivel de amor que sus parientes no eran capaces de compartir con ustedes porque a su vez no lo habían recibido o aprendido de sus mayores. El Padre/Madre Divino no opera de esta forma. Lo único que se requiere para recibir la abundancia Universal es que ustedes se amen y se respeten a si mismos y que hagan lo que les gusta hacer y que no se esclavicen con algo solamente porque “se debería” hacer porque es más “espiritual”.
El único requisito para recibir la abundancia Universal es que ustedes se amen y respeten a sí mismos y hagan aquello que amen hacer. Existen otros dos factores con respecto al bloqueo en el flujo del dinero. En la medida que lean mis palabras comenzarán a reconocer cual es el drama que representan y hasta qué grado lo hacen. Muchos de ustedes todavía están enredados en la culpa y la vergüenza. A esto le llamaré el “Síndrome de la Vergüenza”. Algunos de ustedes no están siquiera conscientes de los motivos por los que se sienten culpables o avergonzados, simplemente lo hacen. Se ha convertido en parte de su vida, en parte de su existencia. Tanto que se aprecia como algo natural, seguro y normal el sentirse de esta manera. La culpa se ha convertido en una forma de vida para ustedes. Esta culpa y vergüenza puede estar en parte conectada con una vida previa todavía desconocida para ustedes en la cual existió abuso del dinero o del poder. Es posible que ustedes no se hayan perdonado a si mismos y liberado la energía que continúa bloqueándolos.
En oportunidades estos sentimientos de vergüenza y culpa afloran en la medida que ustedes crecen espiritualmente. Existe una parte de ustedes que comienza a taparse la cara con las manos con vergüenza en la medida que se acercan a la luz. Es un profundo sentimiento de no ser merecedores y de no ser aceptables ante la luz. Muchos de estos sentimientos se han codificado genéticamente en el ADN de la humanidad durante incontables milenios, en la medida que generación tras generación de almas encarnadas reafirmaron su temor en la realidad tridimensional. Esto ha llevado a una “conciencia de la pobreza” en este planeta. Esta ilusión, que fue creada por la demora en el tiempo que se incorpora al mundo material, les ha llevado a todos ustedes a desarrollar, nutrir y vivir en la conciencia de la pobreza. Ustedes pueden tener todo lo que quieran, ¡busquen y encontrarán!
El próximo factor que influye en el flujo del dinero se relaciona en gran medida con los otros factores y lo llamaré el “Síndrome del Ermitaño”.