Hoy es un día especial para el alma del “guerrero” trabajador de la Luz.
Hoy en un día en donde se ponen a pruebas todas tus circunstancias, aquellas que te han envuelto y cercado a lo largo de toda tu existencia sobre el planeta tierra.
Hoy es un día especial para aquellos que escuchan mi llamado a través de las aguas, que son mi representación en la Tierra.Hoy es un día especial para aquellos que han decidido escuchar a su corazón, y honrar su pedido.
Hoy es un día especial para aquellos que han decidido escuchar las palabras de su Madre en ascensión.No quiero dejarles un mensaje que denote frialdad en las palabras, pero tampoco quiero dejarles un mensaje que ablande vuestro corazón en demasía, que haga que no puedan ver la importancia del momento presente, de lo que se vive en la profundidad de la Madre Tierra.
Hoy es un día para “escuchar”, escuchar verdaderamente, el llamado que está haciendo vuestra Madre Tierra, Gaia… pues muchos la escuchan, muchas la ven sufrir cambios transcendentales, pero muy pocos se detienen a verdaderamente ver y comprender la magnitud de lo que está sucediendo con el Ser que les vio nacer y les entrego el aliento para que pudieran experimentar el primer soplo de vida en esta Tierra.
Amados míos, vuestro planeta, Gaia, está en plena transformación… no una transformación fortuita, que sucede cada cierto tiempo ó por temporadas, ó que llaman de normal, porque es la época del frío ó de la tempestad.
Madre Tierra está en transformación porque ha llegado su tiempo de cambiar, ha llegado su tiempo de transformarse y ascender.Sé bien que esto ha sido dicho muchas veces antes, pero es necesario recordarles que los momentos que vive su Madre Tierra, son el reflejo de lo que cada uno de mis hijos e hijas vive en su interior en este momento.
Si quieren comprender lo que sucede en la Madre Tierra, vean lo que está pasando en ustedes… y si quieren entender lo que está sucediendo en ustedes, vean a la Madre Tierra… todo está íntimamente relacionado y baila al mismo ritmo, el ritmo del balance, de la búsqueda de equilibrio en todos los niveles del Ser, no sólo externamente, sino internamente también, en las profundidades de su cielo, a través del sol… y en las profundidades de vuestros suelos marinos y terrestres, a través de las fallas geológicas y el centro mismo de gravitación terrestre.
Su magnetismo está cambiando, sus redes magnéticas se están recalibrando en este momento… todo vuestro sistema planetario está siendo sometido a duras pruebas en este preciso instante, y es necesario que todos mis “guerreros” trabajadores de la luz, estén preparados para enfrentar a la “bestia” que se erigirá a través de los tiempos, de los mares, de la brisa, de la tierra y el fuego.
No son tiempos para temer amados míos, es tiempo para que entren en consciencia del papel que Madre Tierra les está pidiendo asumir, pues es a esto que han venido en este tiempo, a este lugar bendito y privilegiado de vuestro sistema solar.
Amados hijos, el tiempo no acaba aquí… la vida no termina aquí… muy por el contrario, verán una nueva vida resurgir en el centro de vuestros corazones, cuando sean capaces de enfrentarse a sus propias sombras y miedos… aquellas mismas sombras, dolores y heridas que Madre Tierra ha soportado durante milenios de vida, y que ahora se levanta con una fuerza descomunal, no para dañar… sino para transformarse y hacer emerger la nueva luz, desde dentro de sus entrañas… aquella misma luz que emergerá desde el centro de vuestros pechos, cuando decidan enfrentarse a las sombras, miedos e inseguridades que les han acompañado durante tantos siglos de experiencias…