La vida es sabia. Aprender a descifrar sus mensajes te permitirá fluir con ella en cualquier situación, por desfavorable que parezca, y recoger el regalo que allí se encuentra.
El alma nos está enviando sus mensajes constantemente en una miríada de formas, tanto desde lo que percibimos como realidad externa (lo que parece estar ahí fuera) como desde nuestro interior. Para poder comprender lo que nos dice, es preciso despertar un arte que hemos olvidado: el arte de escuchar la vida. Josep Soler explora este arte de escuchar la vida y alinearse con ella en su libro “El lenguaje del alma”.
En una entrevista a una concertista internacional, la periodista le preguntaba sobre sus planes de futuro y ella respondió: “No hago planes para no interferir en los planes que la vida tiene para mí”. Si la pianista andaba acertada, qué planes crees que la vida tiene para cada persona?
Distingamos inicialmente entre los planes que hace el personaje -o ego- y los planes del alma o el Ser. Los planes que hace el personaje siempre se quedan pequeños respecto a los que hace el alma. Estoy acuerdo con la concertista porque en muchas ocasiones los planes que hacía se quedaban pequeños. Aprendí esto en uno mis viajes a Latinoamérica, donde tuve que cancelar una serie de eventos que tenía programados y las cosas que ocurrieron o los eventos que surgieron fueron mucho mejores que los que mi yo pequeño había planificado.
Las situaciones que ocurren en nuestra vida, ¿tienen una función? Cuál?
Que aparezca la misma pauta o conflicto una y otra vez en nuestra vida, tiene entonces un sentido? Nos apunta hacia algo que hay que comprender, un regalo pendiente de recoger?
Así es. El asunto pendiente nos está hablando de algo que está relacionado con nuestro crecimiento o evolución y que está siendo ignorando, consciente o inconscientemente. Ese crecimiento o evolución es precisamente el regalo que nos ofrece la situación pendiente. No obstante, el hecho de que carezcamos de la consciencia o de la visión de que se trata de un regalo es lo que nos puede impedir afrontar la situación para así poder recogerlo. Por ello, la situación se repite una y otra vez, hasta que dispongamos de la conciencia que permitirá que el regalo sea recogido en su totalidad.
Cómo se organiza todo este guión?
Es la llamada del alma que busca captar nuestra atención para que nos demos cuenta de que hay algo de valor en esa área de la vida y que se presenta una buena oportunidad de descubrirlo. Si la situación se ha estado ignorando durante bastante tiempo, puede llegar a un límite en que nos obliga a hacer algo al respecto. Cuando la llamada del alma llega al cuerpo físico, significa que el asunto es de vital importancia. O bien es algo urgente, o bien lleva demasiado tiempo siendo ignorado.
Llegado ese momento, nos queda finalmente claro que ocupa, no solo un espacio en nuestra conciencia, sino también en nuestro cuerpo, a través del dolor o la incomodidad constante. En ese momento ya no permite ser ignorado por más tiempo, toma protagonismo y requiere atención. Mientras el regalo está pendiente de recoger, el patrón, situación o molestia física continúa presentándose.
Hasta que comprendemos y resolvemos la situación, y entonces aparece el “regalo”.
Por qué sufrimos tanto, si cualquier cosa que ocurre es una oportunidad?
Sufrir es la resistencia a sentir; cuando uno no quiere sentir, cuando se opone a sentir algo, aparece el sufrimiento. El sufrimiento es emocional, el dolor es físico. El dolor pertenece a la vida. Es bueno sentirlo porque es una señal de alerta, es inevitable y forma parte de la experiencia en un cuerpo físico. La función de sufrimiento vuelve a ser despertar, es una llamada intensa de la vida, para darnos cuenta de que somos los creadores de nuestra realidad, que la creamos a través nuestros pensamientos, creencias y limitaciones, lo que llamo el cuerpo mental.
Cómo sufrir menos?