1. Meditar
Meditar o simplemente practicar un poco de respiración consciente puede ayudarte a comenzar el día con una sensación de calma. En lugar de despertar y controlar las notificaciones y correos del teléfono a primera hora, toma solo unos minutos para reposar y experimentar la tranquilidad.
Hay un montón de actividades durante nuestro día, pero hacer un compromiso para iniciar con una energía más tranquila establecerá el tono para el resto del día y te ayudará a aumentar tu enfoque, energía y optimismo.
2. Reflexionar con gratitud
- "Si la única oración que pronunciaste en toda tu vida fue: "gracias", eso es suficiente". - Meister Eckhart
Comienza el día con una reflexión sobre aquellas cosas por las que estás agradecido. Una práctica constante de gratitud por las mañanas aumentará tu conciencia de gratitud por todo el día. También te hará más resistente cuando se produzcan problemas y te ayudará a poner en perspectiva tus prioridades.
3. Establecer una intención diaria
En la tranquilidad de la mañana, antes de apagar los incendios que se necesiten apagar, planifica tu día, centrándote en tres objetivos que deseas lograr. Haz que esas metas sean una prioridad para el día. Cuando estableces una planificación de tu día con intenciones, estás más propenso a sentirte productivo al final de la jornada.
Meditar o simplemente practicar un poco de respiración consciente puede ayudarte a comenzar el día con una sensación de calma. En lugar de despertar y controlar las notificaciones y correos del teléfono a primera hora, toma solo unos minutos para reposar y experimentar la tranquilidad.
Hay un montón de actividades durante nuestro día, pero hacer un compromiso para iniciar con una energía más tranquila establecerá el tono para el resto del día y te ayudará a aumentar tu enfoque, energía y optimismo.
2. Reflexionar con gratitud
- "Si la única oración que pronunciaste en toda tu vida fue: "gracias", eso es suficiente". - Meister Eckhart
Comienza el día con una reflexión sobre aquellas cosas por las que estás agradecido. Una práctica constante de gratitud por las mañanas aumentará tu conciencia de gratitud por todo el día. También te hará más resistente cuando se produzcan problemas y te ayudará a poner en perspectiva tus prioridades.
3. Establecer una intención diaria
En la tranquilidad de la mañana, antes de apagar los incendios que se necesiten apagar, planifica tu día, centrándote en tres objetivos que deseas lograr. Haz que esas metas sean una prioridad para el día. Cuando estableces una planificación de tu día con intenciones, estás más propenso a sentirte productivo al final de la jornada.
4. Rellenar tu horario
A medida que piensas tus intenciones diarias, rellena tu horario para permitirte a ti mismo atender a las eventualidades que se presenten. Rellenar tu horario y dejar lugar para tiempo libre te dará una mejor oportunidad de alcanzar metas. Incluso puede ayudarte a tener más tiempo de ocio durante el día, ya que los momentos de productividad estarán mejor definidos.
5. Hidratación
El cuerpo se despierta deshidratado, por lo que es muy importante beber agua a primera hora de la mañana. Se sugiere beber la mitad de todo el consumo de agua al día llegando a la media mañana. El agua limpia tu sistema de toxinas, te ayuda a sentir menos hambre y a reducir los dolores de cabeza durante todo el día.
6. Estiramiento
A medida que piensas tus intenciones diarias, rellena tu horario para permitirte a ti mismo atender a las eventualidades que se presenten. Rellenar tu horario y dejar lugar para tiempo libre te dará una mejor oportunidad de alcanzar metas. Incluso puede ayudarte a tener más tiempo de ocio durante el día, ya que los momentos de productividad estarán mejor definidos.
5. Hidratación
El cuerpo se despierta deshidratado, por lo que es muy importante beber agua a primera hora de la mañana. Se sugiere beber la mitad de todo el consumo de agua al día llegando a la media mañana. El agua limpia tu sistema de toxinas, te ayuda a sentir menos hambre y a reducir los dolores de cabeza durante todo el día.
6. Estiramiento