El terapeuta y escritor Christopher Hansard señala 6 consejos tibetanos imprescindibles para liberarnos y encontrar la paz en la vida cotidiana. Son estos:
Conoce tu propia verdad:
con ello me refiero a que te dejes guiar por el corazón y no por lo que los demás te digan. Los demás quieren que creas en ellos y que sigas sus opiniones y sus verdades. En la vida cotidiana somos bombardeados por las opiniones de los demás. Pero aunque escuches educadamente a los demás y tengas una mentalidad abierta, debes conocer tu propia verdad.
Para superar realmente tu sensación de agobio, activa tu deseo de conocerte a fondo. Al hacerlo con sinceridad, todo cobra sentido para ti. Y nunca renuncies a tu verdad para que otros se sientan más cómodos.
Conoce lo que vales:
no dejes que el miedo se apodere de ti al creer que no vales nada, porque cuando esto ocurre intentamos compararnos con los demás o con sus logros. Muchas personas, sobre todo en Occidente, valoran su importancia por lo que tienen o por lo que ganan, lo cual es un gran error que lleva directamente a la sensación de agobio, ya que entonces creen que sólo serán más importantes cuando posean más cosas o cuando ganen más dinero.
Sin embargo, esta sensación de valía es inútil e ineficaz. La verdadera sensación de la propia valía sólo puede surgir de tu interior y no tiene nada que ver con el trabajo que realizas, los bienes materiales o alguna otra persona. Surge de saber que como ser humano eres importante.
Crea un espacio para permanecer en calma:
en la sociedad del siglo XXI el nivel de ruido es tan alto que nos desentona constantemente el cuerpo y sus ritmos naturales. Este creciente ataque acústico contra nuestros oídos, mente y cuerpo hace que nos sintamos más agobiados aún, al igual que ocurre con la falta de tiempo.
Para reducir esta sensación de agobio necesitas regresar a la quietud y al silencio. Dedica unos minutos al día a estar en silencio, intentando no pensar.
Rechaza los pensamientos nocivos:
la parte más contagiosa de una situación de agobio es la conmoción tóxica que producen los pensamientos nocivos y el oscuro mundo que crean. Si piensas en los problemas, éstos crecerán. Para dejar de sentirte agobiado debes cambiar tanto tu forma de pensar como el contenido y la calidad de tus pensamientos.
Esfuérzate a diario por reemplazar los pensamientos infelices, crueles y dubitativos por pensamientos llenos de vitalidad y positivismo.
No te desanimes: