Aunque creas que desarrollar tu intuición es algo muy difícil de conseguir, lo cierto es que como toda habilidad puede potenciarse y perfeccionarse. Es cierto que hay muchas personas que tienen un instinto muy poderoso de una manera aparentemente innata. Sin embargo, más que con una intuición acertada, en este sentido va a ser más importante la facilidad que tengamos para dejarnos llevar .
Desarrollar tu intuición te permitirá obtener determinados beneficios, ya que esta habilidad te ayuda a tomar buenas decisiones, resolver problemas, tener más éxito y advertirte de determinados peligros de manera rápida. Para ello, te presentamos 5 maneras con las que puedes empezar hoy mismo a impulsar tu capacidad intuitiva. ¿A qué esperas para ponerlas en práctica?
“La intuición es la lucidez que el corazón conoce y la mente ignora”.
-Anónimo-
1. Confía en tus corazonadas
Confiar en tus corazonadas es importante para terminar con una situación que no te agrada o tomar una decisión importante. ¿Cuántas veces has estado con alguien con quien solo discutías y sufrías? ¿Has estado alguna vez en un trabajo que no te gustaba y tu instinto te decía “déjalo”?
Las llamadas corazonadas cuentan con una ventaja muy importante. Al contrario de la toma de decisiones racional y consciente, no se ven paralizadas o saturadas por el exceso de información. En este sentido se da una paradoja y es que, al no trabajar solamente en el plano consciente o ser solamente un producto de este plano, sus designios pueden haber tenido en cuenta mucha más información. En este sentido, si tienes que tomar una decisión rápida, confía en ella antes que en el azar.
2. Cuidado con los prejuicios que empañan tu intuición
En ocasiones, desarrollar tu intuición no es fácil: una vez que crees estar poniéndola en práctica esta no ofrece los resultados que esperas. Esto puede suceder porque estás confundiendo los prejuicios que tienes con tu propia intuición. Los prejuicios son ideas preconcebidas sobre algo que están tan profundamente instaladas en ti que no sabes diferenciar si son tuyas o las has aprendido. ¿Cómo puedes dispersar esa niebla que provoca en ti esta confusión?
“Dos ojos vendados ven mucho más claro que una mente ciega”.
-Anónimo-.
Cada vez que ante una decisión tu corazonada te diga, por ejemplo, “esa persona no te conviene” tienes que pararte a analizar y reflexionar hasta qué punto se encuentra esto interferido por tus prejuicios o no. Incluso, fíjate si tus experiencias pasadas están provocando esa visión que ahora tienes sobre esa persona.
3. El Mindfulness puede ser un gran aliado
Seguro que has escuchado algo sobre Mindfulness y meditación, ambas técnicas que te permiten centrarte en el momento presente, calmar tu mente de pensamientos que no sirven más que para ofrecerte malestar y para prestar atención a matices de tu entorno que antes pasabas por alto.
El Mindfulness y la meditación te ayudan a conectar contigo mismo, a ser consciente de todos esos prejuicios de los que hablábamos antes y que no forman parte de ti, pero que has asimilado de acuerdo a la sociedad y la cultura en la que has crecido. Con paciencia y practicando todos los días, aunque sean solo 5 minutos, conseguirás liberarte de la ansiedad y el estrés, conectarás con el ahora, observarás tus pensamientos sin juzgarlos y serás capaz de escuchar tu voz interior, tu intuición.
4. Aprende a ser más empático