El momento no está aún decidido… es sólo después del tiempo que nos damos cuenta de ello y reclamamos la propiedad. Sin embargo, eso no quiere decir que no haya libre albedrío. Lo que sucede es que éste simplemente no vive donde el condicionamiento dice que vive.
No vive en el intento de micro controlar incidentes, sino en el estar realmente presentes, radicalmente honestos y, ante todo, en el honrar todo aquello que está realmente vivo en tu corazón… sin importar cuántas veces el impulso de la costumbre repita su temerosa farsa.
La vida se refleja y fluye desde el estado de ser que asumimos. Al enamorarnos de nuestro verdadero núcleo esencial, podemos comenzar a sentir que todo en verdad fluye desde allí. El hielo se derrite. Los constructos se debilitan. El amor brota desde un manantial infinito hacia sí mismo, en todas partes.
¡Los constructos se debilitan! ¡'La realidad’ es un constructo! ¡Cualquier cosa que resulte familiar es un constructo! Los caparazones primarios que nos han protegido se desmoronan. La memoria de las células gritan: ¡Esto no es nada seguro! Sé gentil. Sé paciente. Sé amable y valiente. No hay nada casual acerca de esto. No es para los débiles de corazón.
Entonces...cómo llegamos a sentir el testigo? Hay que practicar auto indagación, hay que meditar, hay que estar en silencio? Tiene sentido hacer algo? Es posible que en esta vida uno solo alcance a comprenderlo intelectualmente pero no a sentirlo?
Este instante tal y como es, es todo… ¿qué le sobra?, ¿qué le falta?… ¡Nada en absoluto!
El ‘yo’ que aparentemente sentiría al testigo, como dices, es una sensación que estaría apareciendo en el momento presente, asimismo la auto-indagación o la meditación, el estar en silencio o cualquier otra acción (incluso alguna acción opuesta como la prisa o la inquietud).
Como puedes notar, todo lo que a-parece en este instante es absolutamente impersonal. No hay un individuo separado decidiendo hacer algo. Hay acción, sí, hay un cuerpo-mente, sí… pero todas estas formas aparentes son la Totalidad a-pareciendo COMO eso.
La ‘comprensión intelectual’ y el ‘sentir’ son también la Totalidad a-pareciendo como eso.
Entonces… ¡Todo es pleno ya! :))
‘¿Cómo…?’ ¡es un distractor!!!! … es la Totalidad jugando a distraerse.
Hasta donde te sea posible deja a un lado todo lo que has aprendido o leído acerca de la libertad o la felicidad el tiempo suficiente para escuchar este mensaje. ¡Comienza de nuevo!
Vayamos hasta el fondo de la cuestión, que es el constante recordatorio de que sólo tú tienes la llave de tu realización. Nadie puede dártela, ni siquiera el más claro de los caminos, método o enseñanza en el mundo.
Permite que cada palabra que leas desaparezca tan pronto como la hayas leído. Permite que las palabras sean como una brisa que sopla a través de tu mente sólo el tiempo necesario para recordarte tu presencia consciente en toda situación.
Ramana Spencer, tarsila, Scott Kiloby
http://la-danza-de-la-nada.tumblr.com/
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